Con la presencia de diversas Autoridades Regionales del ámbito político, académico y gremial, el Padre Obispo, Monseñor Manuel Camilo Vial, acompañado de sacerdotes diocesanos y el sacerdote francés, Piere Dubois, celebraron un nuevo Primero de Mayo, ocasión donde se conmemora el “Día del Trabajo”.

En su homilía, el Pastor resaltó el compromiso y solidaridad permanente de la Iglesia con todos los trabajadores del mundo, destacando en sus palabras a la figura de San José, un carpintero “que con su humilde trabajo en la madera, alimentó con su sustento al hijo de Dios y a su madre María” siendo un ejemplo a las familias.

Señaló que “el trabajo humano y en particular el trabajo manual tiene en el evangelio un significado especial” destacando la importancia del trabajo en la vida del hombre, focalizándose en la situación mundial actual de las alarmantes cifras del desempleo “ es una realidad que el mundo entero está en una profunda crisis, cuyos detonantes han sido los problemas financieros de la economía mundial afectando a los sectores más pobres con diversas repercusiones en las familias”.

Llamó a tener un diálogo social para buscar caminos nuevos y soluciones, para no caer en errores que se gatillaron en la idolatría del dinero y a la economía del excesivo consumismo.

El Padre Obispo, se refirió a las palabras de SS Benedicto XVI, que al ser consultado por las causas de la crisis económica mundial dijo “al final se trata de la avaricia humana como pecado o de la avaricia como idolatría, nosotros debemos denunciar a esta idolatría que se opone al Dios verdadero y que falsifica la imagen de Dios a través de otro dios, el dios del dinero”.

Monseñor Vial, con un marcado hincapié resaltó que “la gran lección que nos dejó esta crisis fue que tras años de privatizar las utilidades, el Estado debió socializar las perdidas”. Llamó a volver a los verdaderos valores de la sociedad, que “sepamos mirar con humildad al Creador y buscar en El la inspiración para resolver nuestros problemas y hacer a través del trabajo, colaboradores de la creación y hacer de esta misión que Dios nos da en comunión con otros”.

El diálogo social

Se llamó al Estado, empresarios y trabajadores “ a buscar nuevos caminos de esperanzas”, para no perder puestos de trabajos y promover nuevos puestos laborales, para una adecuada justicia y bien común. “Es un tiempo para una transformación cultural y espiritual profunda, siendo propicio para volvernos hacia la fraternidad y solidaridad a que llama la Iglesia, a una economía de la comunión y caridad donde todos podamos administrar y gozar de todos los bienes que Dios pone a nuestra disposición”.

Los trabajadores, el principal bien de una empresa

El prelado se refirió también a la responsabilidad social empresarial hoy en día “ es necesario construir con los actores relaciones de confianzas, basados en valores como la probidad, equidad y el bien común, donde todos los actores que forman parte del proceso productivo sientan que su esfuerzo es parte del desarrollo y el bienestar de todos y que el trabajo sea un espacio de integración e interacción social… significa volver a mirar al trabajo como una fuente de realización personal o no sólo como una mercancía que facilita el consumo irracional”

Respecto a la crisis actual, llamó a la reflexión personal y bajo este contexto señaló “el trabajo responsable, la conciencia social, el dialogo informado, la aplicación eficiente de los instrumentos del Estado y la preocupación por los mas pobres, deben ser los instrumentos de nuestro actuar… debemos ser capaces de construir una economía de la solidaridad y de la comunión para que se haga justicia ante las inmensas desigualdades existentes en nuestra sociedad, siendo este uno de los grandes desafíos que nos dejó el Papa Juan Pablo el año 87 en nuestro país”.

Finalmente, manifestó el llamado de los Obispos a ir al encuentro del alma de Chile y actuar con solidaridad, apelando a la creatividad y responsabilidad social del Estado, empresarios y trabajadores.

Destacados trabajadores

En la ceremonia fueron homenajeados el profesor de Religión, Jorge Silva, dirigente gremial en diferentes colegios y actual el Tesorero Provincial de la CUT; Richard Quintana, Asistente Social, Secretario Regional Ministerial del Trabajo y Previsión Social de La Araucanía; Luis y Joice, matrimonio al servicio de la vida en Cristo a través de las CEB, de la Parroquia La Anunciación del Señor.

Fuente: Comunicaciones Temuco