En su primer encuentro con prensa de la zona, el nuevo obispo estuvo acompañado del Nuncio Apostólico, monseñor Giuseppe Pinto; del Cardenal Francisco Javier Errázuriz y del Arzobispo, monseñor Ricardo Ezzati, donde todos resaltaron las condiciones humanas y espirituales de monseñor Ossandón, quien inició sus respuestas recordando su reciente encuentro con el Papa Benedicto XVI. “Estoy muy contento y ansioso de empezar a trabajar, por eso la ordenación sea acá e iniciar en la creación de vinculo y servir con plena alegría y responsabilidad, en comunión con monseñor Ezzati y a quienes forman esta comunidad”, afirmó, relatando que el 2 de octubre el Nuncio Apostólico lo convocó para transmitirlo la decisión papal. “Acepté, pero aclarando que no era por méritos, sino un regalo y gracia de Dios”, enfatizó.

El Cardenal Errázuriz intervino señalando que “todo sacerdote es sacerdote de la Iglesia y está llamado a servir donde Dios se lo pida. El padre Pedro – ahora tendremos que acostumbrarnos decirle monseñor – es una persona muy querida y creo que Dios lo fue preparando en puestos de responsabilidades en la arquidiócesis en Santiago, en Chile y Latinoamérica. Su mayor interés en permanecer en parroquias al servicio de gente pobre.. Es emblemático el tiempo que pasó en la Legua. En definitiva, es una persona con grandes condiciones humanas”.

Durante la conferencia de prensa, fue requerida la visión de monseñor Ezzati, respecto a la realidad social, respondiendo que “estamos viviendo un momento desafiante y desafío comporta siempre dos dimensiones. Una primera dimensión que es de esperanza, de futuro promisorio; pero al mismo tiempo, desafío comporta una dimensión de preocupación. En esta región, he tenido diálogos interesantes con el mundo político, los empresarios y la gente. Uno ve grandes inquietudes y dificultades, pero es en las crisis cuando los valores de la solidaridad y del emprendimiento, de rescatar las mejores fuerzas, se hacen imperiosas. Creo, además, que el mundo político tiene una responsabilidad muy seria. Al conversar con distintos sectores, he encontrado desencanto que nos no hace bien”.

Frente a otra consulta, monseñor Ossandón analizó el rol de los medios de comunicación social y la realidad del mundo. Destacó la importancia de su uso ético de los medios, lamentando que muchos de ellos no contribuyen al bien común de la sociedad. Dijo que la realidad es mucho más de la apariencia. Llamó a hacer una reflexión analítica y crítica de los medios que son muy relevantes para el cuerpo social.

Monseñor Giuseppe Pinto comentó la visita de los obispos chilenos al Papa Benedicto XVI y la tarea de la Misión Continental. Dijo que “son los obispos mismos los que después actuarán las palabras que recibieron. Me toca ser el mensajero y al mismo tiempo, el que vive y madura, junto a los obispos que recibió el Papa.”, precisó, agregando que la Iglesia y su identidad se encuentran en el evangelio; la Iglesia y su actuar se encuentran en el evangelio.. Hizo notar que en el relato de San Lucas de la Anunciación está todo lo que sirve para un obispo y son sólo dos palabras del Ángel: el Señor está Contigo y la respuesta de María, he aquí la sierva del Señor y “dos palabras que quedan para nosotros: gracias y servicio. Monseñor Pedro recibirá con la imposición de las manos, los dos dones: la gracia del Espíritu Santo y el servicio pastoral que ha comenzando al hacer desde su juramento de fe y fidelidad al Papa”.

Finalmente, monseñor Ossandón fue consultado sobre su lema episcopal, recordando que tuvo que solicitar permiso al Cardenal Errázuriz, quien tiene como lema “Para que tengan vida”. Comentó que tras la Conferencia de Aparecida y, porque su labor pastoral será resaltar el encuentro con el Señor, decidió elegir el lema: “Para que en Él tengan vida” Monseñor Ezzati consideró como una coincidencia interesante, porque su lema además es “Evangelizar” , agregando que es “evangelizar para que tengan vida”. “Hasta en esto, el Señor ha sido delicado con nosotros”, concluyó sonriente.



Fuente: Comunicaciones Concepción