En la Casa de Ejercicios Chacahuín, durante los días, 5, 6 y 7 de noviembre se realiza en la Diócesis de Linares, el Primer Encuentro Internacional de Agricultura Sostenible e Inspiración de la Doctrina Social de la Iglesia, organizado por la Fundación de Desarrollo Campesino de Linares, en respuesta y complemento a la Carta Pastoral de los Obispos chilenos a los hombres y mujeres del campo. Aquí se constata que si bien se han abierto nuevas oportunidades en el mundo rural y en la Agricultura, también se han sembrado temores y desconciertos, así como graves desigualdades sociales. Las situaciones nuevas exigen respuestas nuevas que tengan en cuenta la historia del mundo rural, su cultura y sus valores.

Hay nuevos desafíos que asumir, nuevos problemas por solucionar y nuevas oportunidades por aprovechar. La carta Pastoral nos invita a que se respete siempre la igualdad de cada persona humana, que la solidaridad sea la base de las relaciones, tanto en el mundo rural como en toda la sociedad; que se respete el principio de subsidiaridad por el cual valora el aporte original propio de cada persona y organización; y que se promueva el bien común y el destino universal de los bienes, velando por los derechos de los más pobres y sufrientes.

Agricultura sostenible

La política agrícola nacional basada en el desarrollo de mercados externos e internos, fomentando la competitividad y la especialización, ha logrado incrementos de indudable importancia en el valor de la producción (frutas, vinos, semillas, forestal, etc); sin embargo, este crecimiento productivo acarrea consigo aspectos negativos, tales como, la altísima dependencia de insumos importados y tecnologías, y las consecuencias en el medioambiente de su masiva aplicación, generando contaminación, salinización, erosión, efectos que a la fecha no han sido cuantificados.

La agricultura campesina, dada su incapacidad de competir en mercados de alta escala, ha sufrido un proceso de empobrecimiento paulatino con graves consecuencias sociales y ambientales. En la medida que los campesinos/as sean confinados a terrenos marginales, serán víctimas de un proceso de deforestación y erosión transformándose en agentes de degradación ecológica, empujados por factores estructurales que escapan a su control.

La agricultura sostenible propicia una forma diferente de desarrollo de la agricultura, no basada en los mercados, sino en la persona y su entorno, recursos naturales y comunidad, es decir, una forma distinta de producir basada en principios sociales y éticos, por todos aceptados. Su objetivo es permitir la reproducción de la familia campesina en el largo plazo. Son variados los frentes donde la agricultura sostenible debe insertarse: en lo social, fortaleciendo los valores como la solidaridad, en la organización de la comunidad, en la familia y sus componentes, considerando y respetando consideraciones de género; en lo cultural, respetando y valorando la diversidad de manifestaciones particulares a cada zona o sector, y en lo agroecológico, que detallaremos a continuación.

Agricultura sostenible implica una responsabilidad para las futuras generaciones, de la reproducción de la familia, de no perder sus raíces, de afincar a las familias en su entorno.

Entre los aspectos agroecológicos implica:

- protección de suelos, mejoramiento de su fertilidad, manejo del agua: prácticas culturales como terrazas, zanjas de infiltración, arborización, praderas y forrajes, etc.
- reciclaje al interior del predio (guano, compost, abono verde, biofertilizantes), reduciendo la dependencia de insumos externos y por ende del crédito.
- establecimiento de cultivos intercalados
- sí a la diversificación productiva, no a la especialización.
- aprovechamiento integral de los recursos de la explotación.
- mejoramiento de la seguridad alimentaria de las familias, secundario venta de excedentes.

La Fundación DAR de la Diócesis de Linares a través del apoyo de la Agencia Alemana MISEREOR está desarrollando en las áreas del secano interior un proyecto que a la fecha apoya a 200 familias campesinas en Agricultura Sostenible.

Fuente: DAR Linares