Obispado aclara versión periodística
Obispado aclara versión periodística

Refiriéndose a una información publicada por El Mercurio del 23 de Agosto, el secretario canciller del obispado de Valparaíso, Jorge Calderón, desmintió que el obispado de Valparaíso haya solidarizado respecto de la presunta conducta de un sacerdote procesado por abusos sexuales contra menores, y desvinculó completamente esa situación con otro caso ocurrido en Limache mencionado en la misma nota de prensa.

Precisó que la declaración del obispado a la que se refiere esa información se limita a lamentar una demanda de indemnización presentada por la madre de uno de los menores acusadores en un proceso contra el sacerdote Eduardo Olivares, ya que en ella se incluye al obispado de Valparaíso.

En dicha declaración señala además que “la Iglesia reitera su confianza en los Tribunales de Justicia como también su disposición a seguir colaborando con ellos”. Y en ella se agrega que “el Padre Olivares ha reiterado ser inocente y estimamos que así se le debe considerar mientras la autoridad competente no establezca otra cosa”.

El obispado porteño, a través de su secretario canciller, reclamó que la publicación periodística distorsiona el sentido de esa declaración causando un daño a la imagen de la Iglesia.

Precisó que “la presunción de inocencia de un acusado mientras la justicia no se pronuncie de otro modo, es un principio jurídico y moral ampliamente reconocido que debe ser respetado por todos y no implica necesariamente una solidaridad respecto de la conducta delictual de que se le acusa”.

Agregó que, habiendo sido denunciado este caso por la misma Iglesia tanto pública como judicialmente, no se le puede imputar a ella encubrimiento ni protección alguna por los delitos mencionados.

Finalizó señalando que “lo anterior no significa que se deba descuidar o dejar de atender a la persona del acusado en cuanto tal, pues la misericordia y la caridad cristianas siempre alcanzan, debidamente actuadas, para todo ser humano, cualquiera sea o haya sido su comportamiento, como se comprueba en la pastoral que desde muy antiguo realiza la Iglesia en los recintos penitenciarios”.

Valparaíso, 24 de Agosto, 2003

Especiales de Iglesia.cl