Mons. Ricardo Morales llama a respetar y fortalecer la dignidad del trabajo

La noche del miércoles 30 de abril, la comunidad de la Parroquia San José Obrero de Copiapó se congregó para celebrar la Santa Misa en honor a su patrono y conmemorar el Día del Trabajador. La Eucaristía fue presidida por el obispo de Copiapó, Mons. Ricardo Morales, y contó con la presencia de dirigentes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y del Movimiento Obrero de Acción Católica (MOAC), quienes se sumaron a la celebración litúrgica.
Durante su homilía, el obispo Morales destacó tres dimensiones fundamentales del trabajo. En primer lugar, subrayó su naturaleza profundamente humana, afirmando que el trabajo responde a una necesidad interior del ser humano y es camino de crecimiento en dignidad. “El trabajo —señaló— no es solo medio de subsistencia, sino un modo de realización personal y comunitaria”.
En segundo lugar, abordó la perspectiva de la fe, destacando que el trabajo inserta al creyente en la misión de Dios como co-creador: “Trabajar es colaborar con la obra creadora del Señor, y en ello se nos entrega una responsabilidad inmensa”.
Finalmente, el obispo puso énfasis en la dimensión social del trabajo, recordando que toda tarea tiene un impacto en la comunidad y debe orientarse al bien común. “Todo trabajador está llamado a sentirse parte activa de un proyecto compartido, donde se construye sociedad desde la justicia, la solidaridad y el respeto mutuo”, añadió.
La celebración eucarística congregó a una gran cantidad de fieles y culminó con un momento fraterno de encuentro y compartir entre los asistentes, en un ambiente de alegría y comunión parroquial.
La comunidad celebró así no solo a su patrono, San José, modelo de trabajador humilde y justo, sino también la esperanza en un mundo laboral más humano y solidario, inspirado en los valores del Evangelio.
Fuente: Comunicaciones Copiapó