Funcionarios del Obispado de Chillán vivieron fraternal encuentro con personas en situación de calle
En tradicional cena del Mes de la Solidaridad:
Funcionarios del Obispado de Chillán vivieron fraternal encuentro con personas en situación de calle

Como ya se ha transformado en una tradición, se trató de una de las actividades que de mejor manera representa el ejemplo de partir por casa.

En esta oportunidad fueron los propios funcionarios del Obispado de Chillán que tras el término de la jornada laboral, llegaron la noche de este miércoles hasta la Hospedería Municipal para preparar y ofrecer una cena solidaria a las personas en situación de calle que pernoctan allí.

La cita estuvo presidida por el obispo Carlos Pellegrin, quien manifestó que “en este tipo de experiencias uno ve el rostro de Cristo que veía el Padre Hurtado. Es también una oportunidad para que el personal del Obispado pueda ejercer esta caridad, que va más allá de entregar un plato de comida, sino que también debería convertirse en un espíritu de acogida dentro del mismo Obispado para recibir a todos y todas”, destacó agregando con sorpresa que “pude ver a algunos funcionarios que se encontraron con rostros conocidos que habían compartido con ellos de manera íntima y anónima en la cena de Nochebuena en sus propios hogares, y eso me llena de entusiasmo y de alegría, porque el Señor nos pide no sólo predicar, sino que nuestras obras estén cerca de estos hermanos”, subrayó.

Bernardita Reyes, Secretaria del Dpto. de Comunicaciones del Obispado de Chillán, comentó que “si bien es cierto esta es una actividad tradicional, cada vez que se va a realizar me nace una inquietud, quizá será por el temor al ver el dolor humano, pero al llegar, cambia todo al ver esos rostros de alegría que valoran la actitud de amor y de cariño con la que llegamos; por tanto, me quedo con la sensación y con la necesidad de cambiar el rumbo de mi pasividad y a veces, de insensibilidad ante las carencias del prójimo”, confesó.

El fraternal encuentro que se enmarcó dentro del programa del Mes de la Solidaridad que la Iglesia está impulsando durante agosto bajo el lema “En el Año de la Misericordia: Una nación, más que la tierra, es una misión que cumplir”, permitió no sólo compartir un rico plato de comida, sino además momentos de buena música, canto y baile, y de manera especial, de diálogo cercano que llenó de alegría los corazones y rostros de quienes reflejan una de las caras más duras de la pobreza.

Área Social celebró 40 años
Durante la misma jornada, pero en horas de la mañana, el acento también se puso de manera especial en dar a conocer la experiencia que cada departamento del Área Social vive con la solidaridad durante todo el año, el que se llevó a cabo a través de una Asamblea General en casa Tabor.

“Se trató de un encuentro muy provechoso donde llegaron más de 100 personas, y nos permitió conocer un poco más qué hacemos nosotros, porque a veces nos ensimismamos en nuestro quehacer diario, y esto llevó a que muchos conocieran de las otras áreas”, explicó el director del Área Social, P. Héctor Bravo.

El encuentro en el que participaron las áreas de Salud, Carcelaria, Laboral, Rural y Acciones Fraternas, finalizó con la celebración de los 40 años del Área Social.

La última actividad del Mes de la Solidaridad, se desarrollará el próximo miércoles 31, a contar de las 10.00 hrs. en la Cárcel de Chillán, cuando el obispo Carlos Pellegrin, sostenga un encuentro con los internos del centro penitenciario.

Fuente: Comunicaciones Chillán
Chillán, 25 de Agosto, 2016
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